Surge cuando una empresa o gobierno (prestatario) tienen una necesidad de financiación muy elevada.
Surge cuando una empresa o gobierno (prestatario) tienen una necesidad de financiación muy elevada y, por tanto, resulta difícil y costoso obtener un préstamo de un solo prestamista. Entonces la deuda se divide en empréstitos, en otras palabras, pequeños préstamos, que son suscritos por un número elevado de prestamistas a los que se les conoce como obligacionistas o bonistas.
Los empréstitos se pueden obtener de un banco o compañía financiera como préstamos a largo plazo, o de inversionistas de deuda-capital en forma de obligaciones o acciones preferentes. Comúnmente se otorgan a una tasa de interés fija en lugar de dividendos, y deben reembolsarse dentro de un período específico, independientemente de la posición financiera de la empresa.
La colocación de empréstitos se hace a través de un intermediario financiero, que encuentra y coordina los intereses y deseos de la empresa que emite el empréstito, y los ahorradores, que buscan una inversión de sus ahorros.
Los empréstitos suelen clasificase con base en su duración:
- Pagarés: valores emitidos a corto plazo (menos de 1 año).
- Bonos simples: emitidos a corto y medio plazo (de 3 a 5 años).
- Obligaciones: emitidas a más largo plazo, no hay límite de tiempo, hay gobiernos que emiten bonos a 50 años.
Para una mejor comprensión de este concepto y la terminología asociada, examinemos este ejemplo: Supongamos que una empresa emite un empréstito compuesto por 400 bonos, con valor nominal de $200 pesos por obligación, emitido al 90% y reembolsable al 110 por ciento a tres años. Veamos los conceptos asociados más importantes:
Valor nominal: es el importe del título sobre el que se pagan los intereses. En nuestro ejemplo, $200 pesos.
Valor de emisión: importe que el obligacionista o prestamista desembolsa por la compra del título. Se obtiene con la siguiente operación matemática.
VALOR NOMINAL * PORCENTAJE DE EMISIÓN = 200 * 0.90 = 180
Valor de reembolso: importe que recibirá el obligacionista o prestamista de vuelta cuando toda la obligación sea amortizada. Para conocer el valor, habrá que hacer el siguiente cálculo.
VALOR NOMINAL * PORCENTAJE DE REEMBOLSO = 200 * 110% = 220
Prima de reembolso: diferencia entre el valor de reembolso y el valor nominal de la obligación. En el caso de este ejemplo 220 – 200 = 20.
Prima de emisión: diferencia entre el valor nominal y el valor de emisión de la obligación. Sería 200 - 180 = 20.
Entre más alto sea el valor de la prima de emisión y la prima de reembolso, será más rentable el empréstito y más sencilla la venta de los bonos.